La limpieza facial en varias etapas es una de las tendencias de cuidado de la piel más importantes de los últimos años. Como muchos otros fenómenos de belleza que están ganando popularidad, proviene del Lejano Oriente y consiste en una limpieza profunda, casi ritual, de la piel en varios pasos sucesivos. ¿Cómo debe ser una limpieza facial en varias etapas y a qué debe prestar atención en sus fases posteriores? ¡Aquí hay un puñado de consejos prácticos que pueden resultar muy útiles!
Etapa 1: Quitar el maquillaje
El desmaquillado completo, subestimado por muchas de nosotras, resulta ser un elemento clave para el cuidado eficaz de la piel del rostro. El aceite se suele utilizar para desmaquillar en la limpieza facial multifase. ¿Por qué? La fórmula oleosa del aceite es capaz de disolver eficazmente no solo el maquillaje resistente al agua, sino también los restos de sebo y suciedad que quedan en nuestro rostro después de todo un día. Además, no altera el equilibrio hidrolipídico de la piel sensible del rostro. Los fluidos micelares ricos en aceite también funcionan de manera similar. También se pueden utilizar con éxito con pieles grasas y mixtas.
Etapa 2: Limpieza profunda
Después de desmaquillar y eliminar otras impurezas acumuladas en la superficie del rostro, llega el momento de una limpieza profunda. Para que sea eficaz y responda a las necesidades específicas de tu piel, vale la pena elegir cosméticos delicados y específicos para tu tipo de piel. Un gel o espuma suave es perfecto para el uso diario. Sin embargo, si sientes que tu rostro necesita una limpieza profunda adicional, de vez en cuando, 1 o 2 veces por semana.
Etapa 3: Exfoliación
Lavarse la cara con varios pasos puede convertirse en un ritual diario de cuidado de la piel, pero no se verá exactamente igual todos los días. La etapa de exfoliación y eliminación de la epidermis queratinizada, si bien es sumamente importante, no debe realizarse más de una vez por semana. Cuando se usan con más frecuencia, los tratamientos exfoliantes pueden irritar la piel y dañar su barrera hidrolipídica.
Por lo tanto, es mejor reservar una noche específica a la semana, cuando normalmente tiene más tiempo, y atenerse a ese horario. También preste atención a la selección adecuada del cosmético para su tipo de piel. Si tienes la piel sensible o con cuperosis, evita los peelings granulares y elige aquellos con una fórmula enzimática más delicada.
Etapa 4: Tonificación
Un tónico -u otro cosmético con efecto tonificante, como el agua de rosas o un hidrolato- cumple una doble función en la limpieza multifase. En primer lugar, permite eliminar pequeñas impurezas que aún quedan en el rostro del rostro. En segundo lugar, restaura eficazmente el pH natural de la piel del rostro y su nivel óptimo de hidratación, preparándola para futuros tratamientos de belleza. Al elegir un tónico facial, preste atención a su composición: no debe contener alcohol para no resecar e irritar la piel.